Españoles “veletas”, sin identidad

“Ser veleta”, es quizá, el apelativo más apropiado para caracterizar al pueblo español del siglo XXI, aunque también, en menor grado, podríamos aplicarlo al español de la segunda mitad del siglo XX.
“Ser veleta” denota como señala la RAE, inconstancia y sinónimos como tornadizo, expuesto a ser movido por otro, por el viento de moda, incapaz de permanecer firme en su posición, en su gobierno, en su identidad. El español de hoy tiene diferencias sustanciales con aquel que supo crear uno de los imperios más grandes del orbe.
“Ser veleta” tiene que ver con el pensamiento ante todo, pues toda valentía o cobardía, toda motivación o desesperación, nace del pensamiento, de la concepción de la historia y de la vida, de la concepción de pertenencia y conciencia de la propia riqueza. Y aquí, de poco y nada valen los defensores de ciertas tradiciones folclóricas, incluso religiosas, pues tampoco ellos llegan a ver la esencia del problema, promocionando cierta cultura exterior y olvidándose de la savia que debe dar vida a una cultura, la cual no es el puro sentimiento.
“Ser veleta” es dejarse llevar por el aire que sople, sin preguntarse hacia dónde, por qué, para qué, y sobre todo quien es el que sopla. Así, en la historia fueron apareciendo espíritus contrarios de la hispanidad que ha soplado, engañando y tergiversando la historia. Antes esos vientos venían del mundo anglosajón, o del protestantismo, pero ahora en el siglo XXI el enemigo es “de los nuestros”, y está legitimado, está institucionalizado, financiado por el Estado, apoyado por la partitocracia, ante el pavoroso silencio de las instituciones, incluso de la Iglesia Católica. El objetivo es destruir España en su identidad religiosa-cultural.
La situación está aceptada y normalizada por cada ciudadano español, que ya no tiene de español más que caracteres secundarios y casi nada de lo que hizo de España el gran imperio, palabra ésta denostada hoy, para poder enarbolar la única bandera válida, la de la diosa democracia.
Sirva esta simple introducción para animar a contribuir a un cambio de actitud y pasar a la acción en la defensa de la verdadera identidad de España, empezando por esos centros de adoctrinamiento anti-España llamados “escuela, colegios, institutos” incluso guarderías, donde sin pudor ya se inculcan en los niños un desapego del sentimiento patrio, sentimiento y concepto que en la Universidades brilla por su ausencia.
Os dejamos con una referente en estos temas, Paloma Hernández y recomendamos su canal, como también al historiador Patricio Lons, o Fernando Paz, entre otros.
Cuando dejas de creer que la patria tiene un enemigo real, es que has dejado de amarte, porque la patria es la tierra que Dios te dio, es su regalo, tanto como la familia ¿y si estas dispuesto a defender a tu familia, por qué no a tu patria? Es que la ingeniería social ha venido haciendo un lavado de cerebro desde hace décadas, y ahora llamas bien al mal, y mal al bien.
Sobre la disgregación de la hispanidad, escuchemos a un referente autorizado en la materia, el Dr. Alberto Barcenas
Finalmente, dejando a Patricio Lons para la próxima, os dejamos otro referente de autoridad, del que ya hemos publicado aquí: el Dr. Marcelo Gullo
Si no lo visteis, hace tiempo publicamos una interesante entrevista sobre la España actual esta entrevista con Juan Manuel de Prada.